Terminar un tratamiento de ortodoncia da una felicidad infinita. Sin embargo, el fin del tratamiento no significa que el cuidado dental haya terminado. Para asegurarte de que los resultados se mantengan a largo plazo, es fundamental seguir algunas pautas de cuidado posteriores. Aquí te damos 5 consejos a seguir tras finalizar tu tratamiento de ortodoncia.

Usa tu retenedor de forma consistente

Uno de los pasos más importantes tras finalizar el tratamiento de ortodoncia es el uso del retenedor. Los dientes tienden a moverse hacia su posición original después de retirar los brackets o alineadores, por lo que el retenedor es fundamental para mantenerlos en su nuevo lugar. Los ortodoncistas recomiendan usarlo especialmente durante los primeros meses tras la ortodoncia, ya que es cuando los dientes son más propensos a desplazarse.

Hay diferentes tipos de retenedores, desde los removibles hasta los fijos, y tu ortodoncista te indicará cuál es el adecuado para ti. Sigue sus instrucciones y asegúrate de usar el retenedor según lo recomendado, tanto durante el día como por la noche. Recuerda que el uso adecuado del retenedor es clave para preservar los resultados de tu tratamiento.

Mantén una buena higiene bucal

La higiene bucal adecuada es crucial después de la ortodoncia. Durante el tratamiento, los brackets y alambres pueden haber dificultado la limpieza profunda de tus dientes. Ahora que ya no tienes esos obstáculos, es momento de establecer una rutina sólida de cuidado dental.

Cepíllate los dientes al menos dos veces al día con un cepillo de cerdas suaves y usa hilo dental diariamente para eliminar cualquier residuo de comida entre los dientes. Además, considera el uso de un enjuague bucal para combatir bacterias y mantener las encías sanas. También es recomendable realizar limpiezas dentales profesionales con regularidad para asegurarte de que no haya acumulación de placa o sarro que pueda afectar tu sonrisa recién alineada.

Visita a tu ortodoncista regularmente

Aunque hayas terminado tu tratamiento de ortodoncia, las visitas al ortodoncista no deben quedar en el pasado. Es importante programar revisiones regulares con tu ortodoncista, quien se asegurará de que tus dientes se mantengan en la posición correcta y que tu retenedor esté funcionando adecuadamente.

Evita hábitos que puedan desalinear tus dientes

Después de la ortodoncia, algunos hábitos pueden provocar que tus dientes se desplacen, afectando los resultados obtenidos. Masticar objetos duros como bolígrafos, hielo o uñas puede ejercer presión sobre los dientes y contribuir a su movimiento.

Otro hábito importante a evitar es el bruxismo, que consiste en apretar o rechinar los dientes, especialmente mientras duermes. Si sospechas que padeces bruxismo, consulta a tu ortodoncista o dentista, ya que podrían recomendarte una férula de descarga para proteger tus dientes durante la noche.

Mantén una dieta equilibrada y saludable

Lo que comes tiene un impacto directo en la salud de tus dientes y encías. Tras finalizar el tratamiento de ortodoncia, es importante llevar una dieta equilibrada que favorezca la salud bucal. Evita el consumo excesivo de alimentos azucarados o altamente ácidos, ya que pueden dañar el esmalte de los dientes y aumentar el riesgo de caries.

Opta por alimentos ricos en calcio y vitamina D, como lácteos, verduras de hoja verde y pescados grasos, para fortalecer tus dientes y encías. Los alimentos crujientes como zanahorias y manzanas también son excelentes opciones, ya que ayudan a limpiar los dientes de forma natural al masticarlos. Mantener una dieta saludable no solo protege tus dientes, sino que también contribuye a tu bienestar general. Y, por supuesto, si necesitas una revisión, llámanos.